Autor: Ronald Chero Seminario (*) 15 octubre 2012
Érase
una vez un agricultor que vivía en un pueblo lejano de la ciudad. Un día
salió montado en su caballo en horas de
la noche hacia su parcela ,para realizar la labor de riego, una vez que terminó
de regar su cultivo de mango y limón regresó montado en su caballo, camino
hacia su pueblito.
En el transcurso del camino se encontró con
un niñito que lloraba, éste se bajó de su caballo y dolido porque lloraba el
niño lo recogió y lo montó en su caballo y siguió su camino, pero faltando poco
para que llegue a su casa el niño comenzó a crecer y comenzó a salirle un sombrero, el
agricultor se asustó y a medida que iba
avanzando el agricultor iba teniendo mas miedo y luego cuando faltaban cinco
metros para que llegue a su casa el niño desapareció, entonces el agricultor se
desmayó de miedo.
Después que reaccionó continuó el camino a su casa, cuando llegó a
su casa se bajó de su caballo, ingresó a su casa, su esposa y sus hijos le
saludaron pero nuevamente, por lo sucedido volvió a desmayarse, pero esta vez
fue socorrido por sus familiares quienes
después escucharon atentos lo que él les contó acerca de la experiencia que vivió. Finalmente se dieron cuenta que
aquel ser que lo había asustado era un duende que en casos anteriores había
cobrado la vida de muchos pobladores.
(*)
Estudiante del Segundo Ciclo de Producción Agropecuaria del Instituto de
Educación Superior Tecnológico Público, “Centro de Formación Profesional Binacional”, Mallares, provincia
Sullana, Piura-Perú
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